En qué trabajamos y cómo lo hacemos
Nuestra actividad se enmarca dentro de acciones descritas en la Estrategia Española de Ciencia, Tecnología e Innovación (EECTI), fundamentalmente en dos líneas estratégicas:
Línea consolidada en Salud. La investigación del grupo queda enmarcada dentro del desarrollo e innovación de materiales metálicos para reparar funciones del aparato locomotor dañados por enfermedades degenerativas, envejecimiento o accidentes. Esta línea de investigación es avalada por más de 20 años de experiencia.
Dentro de esta línea, la investigación se centra en el estudio y caracterización de materiales metálicos utilizados en el campo biomédico, como Ti y sus aleaciones, aleaciones de Co-Cr, Mg y sus aleaciones, y aceros inoxidables (316L). Además, se proponen modificaciones superficiales para mejorar procesos de degradación superficial (corrosión y desgaste) y biocompatibilidad.
Actualmente, se estudia la mejora de las propiedades a tribocorrosión de aleaciones de CoCr de grado biomédico mediante el deposito combinado de un lubricante sólido, como el óxido de grafeno, y biomoléculas, siempre en colaboración con especialistas en cultivos celulares para verificar la buena biocompatibilidad de los desarrollos superficiales propuestos.
Línea emergente relacionada con Medio ambiente. Dentro de la línea estratégica “Exploración, análisis y prospectiva de la biodiversidad”, en el estudio de la microbiología marina, formación de biofilm sobre estructuras metálicas provocando corrosión microbiológica, o en el estudio de interacciones ecológicas y especies invasoras con materiales metálicos, como, por ejemplo, el mejillón cebra que causa corrosión en embarcaciones por incrustación biológica. Dentro de esta línea los esfuerzos se concentran en el desarrollo de técnicas para la preservación del medio ambiente y desarrollo de nuevos materiales para construcción compatible con la protección del medio ambiente.
Nuestro objetivo en este aspecto es, a través de colaboración estrecha con empresas del sector naval, la lucha contra la formación de biopelículas que además de provocar daños materiales y económicos importantes, evolucionan hacia problemas de incrustación biológica, disminuyendo la eficiencia en servicio de estructuras metálicas y aumentando el riesgo de corrosión. En este momento, el grupo está creando un laboratorio de corrosión biológica adscrito a los servicios científico-técnicos del centro que apoyan e impulsan esta línea de investigación.